Bogotá es Ciudad Gótica

Bogotá es Ciudad Gótica

En una de sus acostumbradas intervenciones para crear cortinas de humo con titulares, Claudia López quiso seguir burlándose de los bogotanos: tratando de bajar la temperatura de la muy candente discusión sobre la inseguridad que se apoderó de Bogotá en su gobierno y acudiendo a un mal chiste, afirmó que Bogotá no es ciudad Gótica https://bit.ly/3ksc2PO

Cínicas son las palabras de la alcaldesa, no solo Bogotá se ha convertido en Ciudad Gótica sino que Batman parece haber sido desterrado por su gobernante.

Para no ir mas lejos, en Bogotá han aparecido en menos de un mes, los cadáveres desmembrados de cuatro personas https://bit.ly/2UmZ7Ew; esos hechos alcaldesa, son la muestra clara de que las bandas delincuenciales están aplicando sus métodos de terror en la disputa territorial que se está viviendo en la capital, cualquier parecido con Ciudad Gótica no es pura coincidencia.

Claudia, en nuestra Bogotá fue asesinato Juan Carlos Gálvez https://bit.ly/35pqp34, uno de los miles de biciusuarios que trabajan en esta pandemia como docimiciliarios y que, como tantos otros asesinados en las calles, se convierten en frías cifras, esas que tanto les gusta manipular desde la Secretaria de Seguridad. Juan Carlos estaba entregando un domicilio, hablaba por teléfono con su hermano – que también guerrea y sobrevive entregando domicilios en esta ciudad de dos dígitos de desempleo – cuando fue abordado por sus asesinos para robarle su teléfono. Sí, Claudia, cuerpos picados en bolsas de basura, jóvenes vidas truncadas por un celular, esa es la realidad de una ciudad aterrada, una ciudad Gótica.

Al igual que Juan Carlos, Jenny Cerquera, una joven madre de tres niñas, fue asesinada https://bit.ly/3eVA1pK; Jenny era enfermera, se dedicaba a cuidar personas de tercera edad y animada por la promoción que se ha hecho para usar la bici, decidió convertirla en su medio de transporte sin saber que ello le costaría la vida. Como la delincuencia evoluciona y las políticas de seguridad en manos suyas y de Hugo Acero, se estancan, los bandidos han migrado a atacar a los bogotanos que, ante el mal servicio de transmilenio, la prevención del COVID y la mala situación económica que nos obliga a buscar la economía, han adoptado este nuevo método de transporte; a Jenny la mataron por robarle su bicicleta. Claudia, Bogotá no es Amsterdam: cuerpos desmembrados, bogotanos asesinados por robarles el celular, la vida a cambio de la bicicleta … esa es la ciudad Gótica en la que vivimos.

David Perilla tenia 18 años y usaba una gorra de colección; en el barrio San Cristobal de Bogotá lo mataron a sangre fría por esa gorra https://bit.ly/3eR62iC; a plena luz del día, rodeado de testigos, unos desalmados asesinos lo atacaron a cuchillo al robarle la gorra que llevaba puesta. En esta Bogotá salvaje en la que la alcaldesa y su secretario de inseguridad se refugian en discusiones sobre cifras y titulares que buscan distraer la atención de lo verdaderamente importante, la vida de los jóvenes se pierde porque la delincuencia, confiada en que se puede salir con suya, confiada en que manda y tiene control, asesina por una gorra. !Y a usted, Claudia, le parece que esto no es ciudad Gótica!

No podemos seguir acostumbrándonos a las frías cifras, no podemos olvidar las vidas truncadas de los bogotanos que día a día caen asesinados por los delincuentes https://bit.ly/32F6awH; Orlando Muñoz puede ser cualquiera de nosotros, el era mesero en uno de los miles de restaurantes que se llevó la pandemia, perdió su empleo y había buscado un trabajo como mensajero para atravesar la crisis. Orlando velaba por su familia desempleada – los bogotanos nos unimos en familia en medio de la crisis económica y alguno se rebusca cuando a los otros les falta -. Orlando fue asesinado con alevosía dentro de un articulado de transmilenio mientras le robaban su teléfono.

Cuando son los delincuentes los que mandan, se dan el lujo de entrar a un sistema que vive lleno de personas, usuarios y funcionarios, para robar y asesinar, sin miedo a las consecuencias, sin recato, sin respeto a las autoridades, sin pensar en la justicia; eso, Claudia, solo pasa en una ciudad que, como ciudad Gótica, esta en manos de la delincuencia y no en las de la autoridad y usted, se supone que representa la autoridad de la capital.

El gobierno de Claudia López se ha caracterizado por esconder su incapacidad – eso es lo único que hace eficientemente – echando mano de la creación de shows politicos que dan rating, encienden pasiones y esconden el debate de fondo sobre la situación de la ciudad: echarle culpas al gobierno central, plantear discusiones xenófobas, tender tramas audiovisuales como la de la silla vacia, gobernar para salir en los noticieros y alborotar tendencias en las redes sociales.

Mientras el show planeado y aceitado es lo que consume la opinión y la ciudadanía, la inseguridad nos carcome, nos mata, nos tiene acorralados y ha creado una ciudad temerosa, con miedo.

No existen políticas de prevención y de choque articuladas para combatir la delincuencia que de manera organizada se tomó a Bogotá; la relación de Claudia con la Fuerza Pública se basa en el irrespeto de ella hacia  los uniformados, en el desconocimiento de las dinámicas institucionales; el relacionamiento con la justicia para que la impunidad no siga reinando, es nula.

Así las cosas, no solamente Bogotá se ha convertido en Ciudad Gótica sino que parece gobernada por el Guasón.

@JcolmenaresE

Publicado: noviembre 15 de 2020

2 comentarios

Los comentarios están cerrados.